viernes, 9 de septiembre de 2011

septiembre

Estos son los libros que leeremos en septiembre:

Maldito karma, de David Safier (Club de las 5)
Una desternillante novela sobre el secreto de la felicidad que ya ha hecho reír a un millón de lectores en Alemania. 

La presentadora de televisión Kim Lange está en el mejor momento de su carrera cuando sufre un accidente y muere aplastada por el lavabo de una estación espacial rusa. En el más allá, Kim se entera de que ha acumulado mal karma a lo largo de su vida: ha engañado a su marido, ha descuidado a su hija y ha amargado a cuantos la rodean. Pronto descubre cuál es su castigo: está en un agujero, tiene dos antenas y seis patas… ¡es una hormiga! Kim no tiene ganas de ir arrastrando migas de pastel. Además, no puede permitir que su marido se consuele con otra.

Sólo le queda una salida: acumular buen karma para ascender por la escalera de la reencarnación y volver a ser humana. Pero el camino para dejar de ser un insecto y convertirse en un ser bípedo es duro y está plagado de contratiempos.







Cartero, de Charles Bukowski (Club de las 7.30)

Post office en inglés) es una novela escrita por Charles Bukowski. Se considera a Cartero una novela autobiográfica de una etapa de la vida de Charles Bukowski
Post Office es la primera novela escrita por Bukowski en la que se incluye su antihéroe Henry Chinaski. La novela cubre la vida de Bukowski desde cerca de 1952 hasta su renuncia del Servicio Postal de los Estados Unidos tres años más tarde, y desde su regreso en 1958 hasta su renuncia final en 1969. Durante este tiempo, Chinaski/Bukowski trabajó como cartero por unos años. Después de renunciar, él se mantenía apostando en carreras de caballos, pero finalmente vuelve al servicio postal para trabajar de distribuidor.
De acuerdo a Born into This, un documental de la vida de Bukowski, John Martin le ofreció a Bukowski 100 dólares mensuales de por vida para que él dejara el trabajo y escribiera a tiempo completo. Él acepto, y Cartero fue escrito en un mes. Cartero fue la primera incursión de Bukowski en las novelas, pues todo su trabajo anterior había sido poesía. Martin, de hecho, estaba algo preocupado de que Bukowski no pudiera hacer la transición a la prosa. Sin embargo, su preocupación se esfumó al ver que Bukowski no tenía problemas en escribir historias sobre su vida.